Gestionar todas las señales que te lanza tu cuerpo para decirte que pares. Te quema la garganta. No te queda aliento.Te duele todo, analizas cada dolor, pero lo entiendes, lo aceptas.Y ahí es cuando tienes que ir más allá. Hacer un esfuerzo más. Siempre pienso que vale la pena. Tienes que seguir empujándote a ti mismo.